Sony Bravia Ultra HD 4K X83C con Android TV, análisis

A inicios de este año, durante en CES 2015 en Las Vegas, Sony dio a conocer su apuesta por Android TV como plataforma para sus televisores que serían lanzados durante este 2015. A finales del mes de abril, Sony México hacia lo propio en nuestro país, trayendo toda su nueva gama de televisiones y poniéndolos a disposición de todos nosotros.

De esta serie de televisores, Sony está lanzando en total 4 familias, y en esta ocasión, Sony México nos ha prestado su modelo Bravia X83C, una gama por debajo del tope de la familia. Siendo el modelo de 49 pulgadas perteneciente a la familia XBR, con características interesantes, como el nuevo procesador X1 hecho por MediaTek, así como un panel UHD 4K, pero sin duda lo más interesante es la incorporación de Android TV.

Durante las últimas semanas hemos estado jugando y metiendo mano a esta Bravia X83C y es momento de darles a conocer los resultados de nuestro análisis a fondo.

Especificaciones técnicas

Demos un repaso a las características que encontramos en esta Bravia X83C de Sony.

Características	Sony Bravia XBR X830C Series
Panel	LED con resolución 4K UHD y tecnología Triluminos de 49 pulgadas (123 cm.)
Dimensiones	109.3 x 64.3 x 6 centimetros, peso 15.4 kilogramos (Con soporte de mesa)
Retroiluminación	Edge LED
Sintonizador	Doble sintonizador DVB-T/C/S2
Control	Soporte para control remoto One-Flick, control Dual-Shock, teclados y controles Bluetooth
Extras	Screen mirroring, WiFi Direct y Google Cast
Smart TV	Android TV basado en Lollipop 5.0.2
Conexiones	4 x HDMI 2.0 compatible con MHL 3, 2 x USB 2.0, 1 x USB 3.0, Vídeo por componentes, 2 Salidas de Audio mini jack híbridas y 1 Óptica, Ethernet, WiFi integrado, Blutooth y Entrada Conexión RF (Coaxial)
Precio	27,999 pesos

Diseño

Como es costumbre, es momento de arrancar con el aspecto físico, algo que en primera instancia nos puede enamorar o simplemente nos puede hacer pasar de largo. Y en el caso de este modelo, Sony se ha empeñado en traernos un televisor delgado y ligero, con un aspecto discreto, sobrio y agradable.

Este aspecto hará que combine con cualquier decoración, ya que todo el televisor viene en color negro, con unos marcos en aluminio de apenas 8 milímetros que hacen que la pantalla abarque buena parte del frontal sin nada que estorbe o llame la atención. Fuera del marco, en la parte inferior justo debajo del logo de la compañía, tenemos un módulo cromado de 5 milímetros que sobresale, aquí tenemos el puerto infrarrojo para recibir la señal del control remoto, así como un sensor de iluminación y un LED de notificaciones.

Cuenta con la opción de usarse con un soporte para mesa en acabado espejo cromado oscuro, soporte discreto y elegante que ofrece una imagen complementaria al televisor y hace juego con el módulo que sobresale. Por otro lado, también es compatible con el estándar VESA, por lo que podremos colocarla sobre una pared si así lo deseamos.

La mayoría de las conexiones se encuentran sobre el lateral izquierdo, aquí tendremos acceso a los 4 puertos HDMI, 3 USB, las 2 salidas de audio y el coaxial. Abajo de estos, nos encontraremos un pequeño panel con el botón de encendido, uno para seleccionar la fuente de video y un rombo para seleccionar canal y nivel de audio. Y ya en la parte posterior del televisor, nos encontraremos con otro espacio de conexiones, con el video componente, la entrada Ethernet y el audio digital.

Hay que mencionar que el televisor es delgado, sobre todo en la parte superior, donde apenas alcanza 2 centímetros, pero conforme vamos bajando, el grosor se incrementa hasta llegar a los 6 centímetros, esto debido a que en la parte inferior tenemos los dos altavoces de 10 watts de salida que apuntan hacia abajo y no hacia al frente.

En cuanto al control remoto, su diseño es clásico, nada revolucionario o que no hayamos visto antes, una barra con lo números en la parte superior, botones de funciones, teclas de navegación al centro en forma circular y los clásicos para cambiar canal y volumen en la parte inferior. El aspecto destacable seria la tecla central de 'Netflix', que por supuesto nos abrirá la app como si fuera un acceso directo.

Este televisor es compatible con el control remoto One-Flick, que gracias a su pequeño tamaño, la incorporación de un micrófono y un touchpad, nos permite manejar de forma más natural sobre la interfaz de la tele y nos facilita muchas acciones. Lamentablemente, este control no viene incluido y se tiene que adquirir por separado.

Calidad de imagen

Desde hace varios años, Sony ha empleado es sus teles una pantalla en acabado mate, esto con la intención de no ser tan propensa a los reflejos, algo que podría funcionar, pero la realidad es que afecta la calidad de imagen, junto a otros factores de los que hablaremos a continuación.

El panel que usa Sony más la implementacion de sus tecnologías como Triluminos, 4K X-Reality PRO y Motionflow XR, hacen que la calidad de imagen sea por demás destacable, los colores son intensos, bien definidos y nos muestra una buena gama de colores. La parte negativa es la falta de brillo que hace que si estamos en un lugar muy iluminado, los reflejos aparezcan de forma inminente.

Por otro lado, algo sucede en los montajes de los paneles de Sony, ya que si apagamos todas las luces, veremos como en las esquinas inferiores tenemos fugas de luz y una carga de brillo superior al resto del panel. Esto hará que el contraste dañe la emisión de colores y sobre todo afecte el color negro, mostrando una especie de gris que es extremadamente molesto, sobre todo si estamos ante un panel 4K que debería ofrecemos la mejor calidad de imagen posible.

Sony presume que gracias a su procesador X1 y su tecnología, son capaces de "masterizar" imágenes provenientes de una fuente de menor resolución y así adaptarlo a este panel 4K como si se tratara de resolución nativa en alta definición. La realidad es que en la papel suena grandioso, pero en la práctica esto no se percibe y muchas de las señales en 720p o inferiores, lucen como lo que son, resoluciones inferiores.

Por último, este televisor cuenta, por supuesto, con perfiles de configuración de imagen de acuerdo al contenido que estemos viendo, lo curioso es que, sólo podemos hacer uso de ellos si estamos ante contenido proveniente vía HDMI, Video Compuesto o Coaxial, es decir, si estamos sintonizando contenido proveniente de un servicio en internet, no podemos configurar la imagen.

Calidad de sonido

Algo que Sony ha sabido explotar en sus televisores y que en esta gama 2015 demuestra una interesante evolución, es el aspecto del sonido. Ya que a pesar de tener sólo dos altavoces de 10 Watts cada uno y que éstos apunten hacia abajo, podría parecer una mala decisión, pero no, esto ayuda a dar profundidad y separar de mejor manera los canales de audio disponibles.

Los altavoces, al igual que el panel, están equipados con tecnología de la casa que ayuda a masterizar el audio comprimido y restaura mucha de esa información que se perdió en dicha compresión. El resultado es verdaderamente maravilloso, buena definición y separación de canales, además de una muy baja saturación a frecuencias altas.

Asimismo, la caja donde están integrados los altavoces, hacen que la acústica sea la idónea para el contenido que estemos viendo, lo adapta a las circunstancias y evita la molesta vibración. Además, cuenta con perfiles que podemos configurar si queremos resaltar los graves o los agudos, o darle mayor peso a las voces, vamos, nuevamente se trata de adaptar de la mejor manera el audio a la imagen, pero si no sabemos mucho de este campo, la configuración automática hace un muy buen trabajo.

Android TV como plataforma Smart TV

La más grande apuesta de este televisor Bravia es la incorporación de Android TV como plataforma para contenido Smart, que puede ser de gran ayuda, pero puede que también afecte el desempeño del televisor. Me explico.

Al tener Android TV como plataforma, tendremos acceso a todo el contenido que ofrece Google dentro de sus servicios, bueno, casi todo, ya que con sólo acceder con nuestro perfile de Google, nos aparecerá nuestra música, nuestras películas y nuestras aplicaciones, pero ojo aquí, sólo aplicaciones adaptadas a televisión, es decir, muy pocas, de verdad muy pocas.

La interfaz es espectacular, Material Design a pantalla grande sin duda se ve mejor que en nuestro smartphone, y gracias a ello, se vuelve una extensión de él, nos resultará muy conocido e intuitivo, todo está dividido en categorías y es muy fácil elegir la opción que deseemos, la navegación es sencilla y muy agradable.

A pesar de esto, Android TV es aún una plataforma muy joven, carece de funciones básicas como un navegador o una aplicación para Gmail. Por otro lado, hay que tener presente que estamos ante un televisor con un sistema operativo, lo que convierte el televisor en una computadora en automático, ya que estamos ante servicios que se pueden instalar y desinstalar, además de que en ocasiones el sistema se satura y eso provoca que tengamos que prender y apagar, ya que tampoco hay un gestor de multitarea.

En este caso, el televisor cuenta con almacenamiento de 8GB, pero sólo tendremos disponibles 6.2GB para instalar aplicaciones, y si consideramos que por ejemplo un juego pesa más de 1GB, entonces nuestra memoria corre el riesgo de llenarse a la mínima provocación. Se mencionaba que sería posible instalar aplicaciones en una memoria externa, pero por más que lo intentamos nunca nos apareció dicha opción.

Otro punto en contra es el tiempo que tarda en actualizarse, ok, puede que el paquete de actualización sea de gran tamaño, pero cuando el sistema empieza a actualizarse no hay información del peso ni una barra de progreso, sólo una imagen que nos dice que no desconectemos la televisión. Para poner en perspectiva, el día que recibimos la televisión nos apareció una actualización disponible, que tardó cerca de 5 horas en concluir, esto bajo una conexión de 20MB, pero nunca supimos lo que se instaló o cuanto pesaba dicho paquete.

También extrañamos la posibilidad de cambiar la posición de las aplicaciones en la pantalla principal, todo se instala en orden al final de la fila del lado derecho, pero curiosamente la sección de apps, se reacomoda de forma automática de acuerdo al uso que demos a cada aplicación, o sea, un caos si tenemos muchas apps instaladas.

La opción de duplicación de pantalla tiene un funcionamiento muy errático, ya que en Android tiene ciertos cortes y no funciona bajo Google Cast, sino a través de una app nativa de Sony, que hace que la televisión se desconecte del WiFi y se conecte de forma directa al smartphone, pudiendo controlar todo a través de smartphone, pero con desconexiones constantes. Esto, bajo iOS es mucho peor, ya que hay ocasiones que simplemente se desconecta y la única forma de volver a conectar es reiniciando el televisor.

Ya comentábamos que Android TV no tiene Chrome o algún otro navegador, pero si tiene búsqueda, la cual está limitada a contenido ya sea dentro de los servicios de Música, Películas, Juegos o YouTube, así como a información básica que mostrará la pantalla, pero nada más, no podemos tener más información, sin duda uno de los puntos más débiles del sistema.

Como nota curiosa, durante al análisis estuvimos instalando un juego de casi 2GB, cuando llevaba menos de la mitad se nos fue la energía eléctrica, cuando ésta regresó, encendimos el televisor y vimos que la app seguía con la barra de progreso, pensamos que retomaría la descarga donde se había quedado, pero no, la descarga quedo atorada y no existe manera de forzarla o eliminarla, inclusive dentro del gestor de aplicaciones no aparece porque no está instalada, lo que hace que dicha app se quedará ocupando un espacio en la pantalla de inicio con su barra de progreso sin avanzar. La única solución es restaurar a lo valores de fabrica.

Por último, hay que hacer especial mención de los tiempos de carga, ya que nuevamente podemos esperar varios minutos para poder usar el televisor, al estar en una aplicación, como por ejemplo Netlix, y decidimos regresar al menú de inicio nos puede llevar casi 1 minuto, y si decidimos abrir una aplicación inmediatamente después de cerrar otra, entonces el tiempo de espera será de entre 1 y 3 minutos.

La opinión de Xataka México

Esta televisión Sony Bravia X83C con Android TV es una apuesta interesante por parte del fabricante al incorpora un poderoso sistema operativo sin necesidad de dispositivos adicionales, lamentablemente Android TV es un sistema aún muy joven y con muchos problema por resolver, ojo aquí, el televisor Sony funciona a la perfección cuando vemos contenido de otras fuentes conectadas, ya sea por HDMI o USB, pero el uso de la plataforma Smart aún deja mucho de que desear.

Los 28 mil pesos que necesitamos para hacernos de un televisor con Android TV y resolución 4K, no justifican el gasto, simple y sencillamente por dos razones: primero la carencia de contenido 4K que nos haga sacar todo el provecho a este televisor, y segundo, Android TV al día de hoy es más una opción para atraer gente que actualmente usa el sistema en su smartphone, que una verdadera y poderosa plataforma que nos haga trasladar la experiencia de nuestro celular a una pantalla grande.

Por supuesto no dudamos que en un futuro Android TV crezca y se vuela más útil y sin tantos fallos, pero al día de hoy no lo es y dista mucho de ser una opción dentro las plataforma de televisiones inteligentes.