Por fin terminamos con los rumores y las filtraciones. El nuevo buque insignia de LG ha sido develado; uno de los dos teléfonos de gama alta que la empresa surcoreana traerá para este año.
Como ya se sabía, se llama LG G5 y viene a ser el sucesor del LG G4 presentado el año pasado. Pese a ello, y tal como la empresa lo reveló, no es sólo una evolución de la línea G, sino una apuesta bastante atrevida basada en la modularidad.
Metálico, pero con batería intercambiable
El primer cambio del terminal, es en torno a su diseño. El año pasado se atrevieron con diferentes materiales y texturas, pero en este 2016 están saltando directamente al metal. Aunque ojo, lo hacen sin olvidarse de la batería removible ni de la ampliación vía microSD.
¿Cómo lo logran?, las imágenes filtradas y los rumores tenían razón. El móvil incorpora una sección removible en la parte inferior, si la removemos podemos quitar o, en un caso más práctico, cambiar la batería. Todo con el fin de tener un diseño unibody, sin comprometer dicha la funcionalidad.
Para quien pregunte sus dimensiones exactas, éstas son 149.4 x 73.9 x 7.7 milímetros, y su peso es de 159 gramos. Los colores en los que estará disponible son: plata, titan, oro y rosa, siendo estos dos últimos los de mayor tendencia en el mercado.
A estas alturas todos los fabricantes han dejado de aumentar el tamaño de sus pantallas, dejándonos en claro que las 5.1-3 pulgadas son más que ideales. LG había sido de los pocos que llegaban a las 5.5 pulgadas, no obstante, para este año baja el tamaño pero sigue aprovechando el frontal con marcos pequeños.
En concreto tenemos una pantalla de 5.3 pulgadas confeccionada con un panel IPS y con resolución de 2560 x 1440 pixeles, su densidad se queda en 554 ppi. Algo a destacar de este apartado es que el brillo máximo puede ser de hasta 850 nits, gracias al nuevo modo ‘Daylight’ que no es más que un control inteligente de brillo.
Como todos los estábamos esperando, LG no escatima en temas de hardware, por ello están estrenando el nuevo chipset de Qualcomm, Snapdragon 820: con núcleos de 64-bit, una GPU Adreno 530 y un módem X12 LTE. La memoria RAM es de 4GB LPDDR4. El almacenamiento se queda en 32GB, pero se podrá ampliar hasta los 2TB con tarjetas microSD.
Todo el hardware se alimenta con una batería de 2800 mAh, que como hemos dicho, podrá ser removida y/o reemplazada cuando lo deseemos.
LG también ha puesto toda la carne en el asador con el sistema fotográfico del móvil. Su apuesta se basa en un sistema con dos sensores: uno de 78 y otro de 135 grados, ofreciendo un mayor ángulo de captura, principalmente para tomas panorámicas. Los sensores son de 16 y 8 megapixeles respectivamente. La cámara frontal es de 8 megapixeles.
La modularidad llega, por fin, a los smartphones
Pero más allá de las especificaciones técnicas, la joya de la corona es su sistema modular. La sección inferior, además de permitir remover la batería, nos pemitirá conectar dos diferentes módulos para ampliar las funcionalidades del terminal.
El primero es es LG CAM Plus, que como su nombre lo indica, estará enfocado en potenciar la faceta fotográfica. Sumará, a la batería normal del teléfono, una adicional de 1200 mAh, e integraría diversos botones físicos con los que podremos controlar con mayor detalles la captura de fotos.
Por ejemplo: tenemos uno de encendido, un disparador, para iniciar la grabación y uno para realizar zoom. Además, dicho módulo nos facilitará el agarre del móvil en fotografía agregándole una protuberancia, algo clásico que vemos en cámaras compactas.
El segundo módulo es el LG Hi-Fi Plus, enfocado al audio. Dicho accesorio fue creado en colaboración con B&O PLAY, y agrega al dispositivo el soporte para reproducir audio 32-bit 384KHz.
Otros detalles que no podemos omitir del terminal son: integra un sensor de huellas dáctilares en la parte trasera, en una posición similar al montado en el Nexus 5x, y el puerto principal (tanto para carga como para transferencia de datos) es un USB Type-C.
En torno a funcionalidades de software destaca la de ‘Always-on’, que ya habíamos conocido en un teaser publicado por la compañía. Con ella podremos visualizar en pantalla notificaciones, la hora y fecha de manera continua sin gastar tanta batería.
El “truco”, según la compañía, se basa en iluminar sólo una pequeña sección de la pantalla, gracias a modificaciones en de control de la retroiluminación, consumiendo una cantidad mínima de batería.
De serie llegará con Android 6.0 Marshmallow, pero estrena una nueva interfaz con la que se omite el cajón de aplicaciones. Algo parecido a los que han hecho Xiaomi y Huawei con sus capas de personalización.
Precio y disponibilidad
LG no ha revelado detalles de precio ni disponibilidad de este G5. Hay que esperar unas semanas para confirmar su llegada a México, y su precio de venta. Asimismo nos interesará conocer el precio y disponibilidad de sus módulos.
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